En el corazón de la ciudad fronteriza de Tijuana, en el norte de México, se erige una tienda de rock que durante 36 años ha resistido el ir y venir del tiempo y las nuevas tecnologías, incluidas las variantes musicales que se han impuesto a la imaginación popular entre las multitudes. .
Se trata de La Ciruela Eléctrica, fundada en 1986 por Sergio Torres, que hasta el día de hoy ha sido un pequeño oasis para la comunidad rockera que vive y visita la ciudad del norte de México, en el estado de Baja California, y un símbolo de resistencia que aún tiene esa característica correlación musical transfronteriza entre México y Estados Unidos.
En los años de su formación, el mundo del rock vivió el apogeo del grunge, pero también de géneros como el britpop y el ska punk, que generaron revuelo en Tijuana y la ciudad estadounidense de San Diego. , en el que los oyentes comenzaron a buscar frenéticamente material musical.
Sergio Torres, titular de Electric Plum, dijo a Efe que permaneció ocho años en el mercado informal mexicano y que luego de esta efervescencia del rock decidieron mudarse, en 1994, a donde están actualmente, en el centro de la ciudad, como medio de expansión legítima.
LA MUERTE Y EL AUGE DEL VINILO
Torres cuenta que cuando abrió la tienda, el revuelo de los ciudadanos que cruzaban la frontera norte desde México fue con los vinilos y después pusieron a la venta el casete, aunque con el surgimiento del disco la tienda vivió su apogeo.
“Se vendieron muchos discos, más que nada y eso fue lo que quedó mucho tiempo”, recuerda.
Luego llegó el año 2008 y la gente perdió interés en el formato físico, sobre todo cuando empezó la “era de las descargas”, que significaba bajar canciones “y llevar 4.000 canciones a un Ipod”, lo que perjudicó a la industria musical y a espacios como el que sufrió Sergio con la nueva tendencia.
A pesar de ello, nunca renunció a seguir teniendo vinilos a la venta, los cuales reaparecieron con este fenómeno de coleccionismo que incluso llevó a que la industria musical reeditara algunos temas antiguos y bandas nuevas por venir a esta agrupación para sus grabaciones.
En medio de esta emoción por los vinilos, Sergio cuenta que alguna vez tuvo una copia de Velvet Underground y Nico (45 Aniversario), pero una versión monofónica especial, de la que dijo “la pusimos en la pared y los ingleses vinieron a comprarla, nada más tiene”. vino y se fue”.
Y en eso se destacó la tienda, apuntó, por tener, además de lo más comercial, rarezas o materiales que no se encontraban en ningún otro lugar de la región como “manta Butcher de los Beatles, o algunas copias mexicanas como los discos de “La Revolución” de Emiliano Zapata y Toncho Pilatos, cosas que señaló “fueron primeras ediciones y otras”.
“La Ciruela es solo eso, un pequeño oasis para los más románticos en la música, sigue adquiriendo material físico, rarezas musicales, material local y material de bandas y bandas underground americanas, que ha sido una constante en Tijuana desde hace mucho tiempo. el tiempo, los años, la correlación musical de un país a otro, a través de la música”, dijo.
LA PROXIMIDAD A ESTADOS UNIDOS LE DA VENTAJA AL RESTO DEL PAÍS
En el aspecto musical, Sergio comparte que cuando empezó con la tienda ya había una escena musical establecida en Tijuana, en la que se destacaban agrupaciones como Tijuana No y Mexican Jumping Frijoles, que tuvieron su impacto gracias a la relación que han tenido. con él para siempre. desde entonces, la música rock se ha trasladado de ciudades como San Diego y Los Ángeles, California, a la costa oeste de los Estados Unidos.
“Había un movimiento musical que estaba muy influenciado y ligado a lo que estaba pasando musicalmente hablando en Estados Unidos y eso fue una gran ventaja, estar en la frontera, sobre todo para los músicos, que tienen acceso a escuchar música diferente en vivo y eso muchas veces vienen a tocar en vivo a Tijuana y viceversa”, dijo.
Dijo que a través de esta estrecha relación con los Estados Unidos, ha permitido que Electric Plum “cultive” más cultura, así como a los estadounidenses que cruzan la frontera hacia México y disfrutan “de la escena (musical)”.
“La música fronteriza siempre ha tenido esta importancia, que no se encuentra en otras partes del país; sí, es un fenómeno que está pasando aquí, es algo muy local, muy parecido a Tijuana”, señaló.
LAS MUJERES GANAN TIERRA
Para Sergio, esta correlación binacional ha marcado la pauta para que las personas sigan buscando material en su tienda, especialmente para mujeres, a pesar de las nuevas plataformas, ya que los gustos de las personas también se han diversificado.