La inflación en la primera quincena de julio en Tijuana fue de 0.28% para una aceleración de 9.33% en la tasa anual, al documentar su nivel más alto en 23 años para este periodo, según datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) .
Nuevamente, los problemas de la cadena de suministro, la crisis energética y el choque de demanda empujaron al alza los precios, especialmente los alimentos, que se dispararon 14.90% interanual, un cambio respecto a un alza que no se veía en más de una década en Tijuana.
Las principales alzas anuales corresponden a cebolla (94,96%); calabacín (59,84%); patatas y otros tubérculos (50,13%); naranja (34,38%); aceites y grasas (41,99%); harina de trigo (38,090%); limón (29,18%); huevo (28,02%); pan (17,79%), leche (13,83%); y carne vacuna (10,53%).
Por otro lado, los tijuanenses continúan sufriendo la inflación eléctrica, que alcanzó 16.79% a tasa anual durante la primera quincena de julio de 2022, para registrar un nuevo máximo en 14 años.
Así, se espera que la escalada de precios de alimentos y electricidad en Tijuana continúe en los próximos meses, por lo que el escenario para los ciudadanos se complica con un mercado laboral rezagado respecto a sus salarios.